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CruceDeCaminos

Lo Que Necesité


Into the Wide Open 
 
Lo que necesité no fueron
ni besos en otras bocas,
ni copas de vino viejo,
ni destellos en momentos,
que resucitaran mis ojos al mundo.

Lo que necesité no estaba allí,
a la altura de mi mano,
para decantarme por vivir.
Porque tú no estabas a mi alcance...

Para arrastrarme junto a ti al mar,
para regalarme tus ojos con los que ver el mundo
y así verme a mi mismo en realidad.

Tú no estabas allí...
como una rosa floreciendo,
como un manto de nieve cubriendolo todo hasta quemar,
como mi verdadero amor.

No estabas allí,
 y a punto estuve de abandonarme a mi mismo,
de dejar de sentir,
porque te necesito y te necesité,
y si ahora te volviera a perder,
nada calmaría mi dolor,
ni besos, ni santos, ni drogas, ni calor,
nada derretiría esa oscura manta de perdición.
 
Escribo esto y no me acaba de gustar, así que para dejaros otro sabor de boca, os busco y os enlazo otro poema que escribí aquí hace algún tiempo... os dejo un fragmento, el resto en el enlace:
 
"Mientras oigo a Charlie Parker,
me lleno de tu arte,
porque ese libro sin nombre eres tu.
Lo has escrito tu,
lo has vivido tu,
y cada letra es verde y calabaza,
como tu pelo y tus ojos.
Y vuelvo, claro que vuelvo."
 
Cuatro Palabras Más. Carlos D. Redondo, Noviembre 2004
 
 http://crucedecaminos.blogia.com/2004/111601-cuatro-palabras-mas.php
 
Niña, te dedico este poema, que ya te dije que era el que más me gustaba de todos los que había escrito, entonces no te conocía, pero me recuerdas todo eso y más, aunque no tengas el pelo calabaza o los ojos verdes.
 
Carlos. 

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