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CruceDeCaminos

La Niebla de la Guerra

Abro la puerta. Detrás de ella nada, solo sombras que envuelven la luz y la apartan de mi mirada. Todo es gris, un gris más cercano al acero que al plomo, pero denso como metal líquido. No alcanzo a ver el otro lado de la calle, aunque vislumbro cascotes y miseria. Justo delante de mis pies hay un gran pedazo de algo que anteriormente quizás fuera una sillón. La niebla es espesa, pero dificilmente podría considerarse que tiene un origen natural, carece de esa humedad o del movimiento necesario para ello. Doy un paso y cruzo el umbral, a pesar de que no se lo que me espera, bajo mi pie izquierdo hay un felpudo parcialmente quemado como un estropajo viejo, donde solo se aprecian tres letras. WEL. No hay nadie junto a mi, ni tampoco en mi casa, así que no tengo más remedio que hacerlo, caminar hasta averiguar algún sentido a toda la situación. Dentro no funciona nada y todas las ventanas parecen estar rotas y gran parte de los muebles destrozados, no hay nada por hacer allí más que limpiar o refugiarme.

No recuerdo que ha sucedido, ni tampoco donde estaba antes de despertarme en el sotano de la casa.

El pánico comienza a absorberme porque por primera vez soy consciente de que carezco de respuestas para todo. Para donde estoy o que es lo que hacía. Para que es lo que quiero hacer o quien me acompaña. Y mientras que pienso todo esto, absorto en mi interior, mi antebrazo desnudo se va cubriendo de una fina película de polvo, de ceniza reseca y monocolor. Gris. Va a recubriendo mi piel y por primera vez me doy cuenta de que me falta una gran parte de la camisa que me recubre. En mis pantalones sucede igual. Voy practicamente desnudo y en las piernas tengo heridas. Una punzada en la cara y sangre reseca en mi mano derecha. Tengo un golpe a uno de mis ojos. Pienso que probablemente ese golpe fue lo que me dejo inconsciente y que algo me debió pasar en las piernas para tener quemaduras en ellas.

Aún permanezco con un pie dentro de mi/la casa. Doy otro paso más y grito. "¿Hay alguien?" Pero parece ser vano...

...dos metros más allá, en lo que aparentemente debía ser un jardin hay un gran socavón y un coche semienterrado y quemado dentro de el. Huele a plastico quemado aunque sobre las llantas del coche no queda nada salvo el metal ennegrecido. Cinco metros más allá, encuentro un buzón en apariencia intacto aunque también quemado por fuera. Lo toco ligeramente para cerciorarme de que no quema y despúes lo abro. Tres cartas encuentro. En la que está en medio y mejor conservada leo.

"Alexander Ross".

...Continuará ¿o no?...

2 comentarios

la hechicera de la luna -

Parece que hemos llegado todos de la misma manera, jaja.
Interesante texto, seguiremos leyendo, de momento feliz fin de semana...

El Viajero -

Hola!

LLegué aquí por casualidad (y la ayuda de los enlaces de Galatea): y me quedaré a leer. y volveré!

Besos de un Viajero! :-)