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CruceDeCaminos

Silencio

Hola a tod@s!!

Había oido noticias sobre lo sucedido en Hondarribia (se escribe con H??) y el pobre muchacho Jokin. Ahora se llenan páginas y páginas con lo sucedido, pero en realidad fue el silencio lo que le mató.

El silencio de todos los que le rodeaban, que veían como era maltratado, castigado hasta que su alma no pudo más.

Todos sabemos ya, que entre los chicos que le maltrataron y acosaron durante un año, estaban los hijos de tres profesores. Profesores del mismo instituto y que miraron para otro lado. Nadie salió en su defensa, ningun adulto lo protegió... ¿a quien hay que exigirle responsabilidades ahora? A los educadores, por callar lo que todos sabían y lo que nadie quiso, ni quiere decir.

Ayer mismo veía en un programa de televisión, como una madre del colegio afirma que en el pueblo nadie dice nada porque son hijos de profesores. Pero, ¿Y los profesores? Afirman que una profesora le sometió a recoger los rollos higienicos que le habían lanzado para humillarle. Y nadie se para a pensar quien es y que hace esta señora, porque permitía esta situación... ¿quizás porque la llevaban a cabo los hijos de sus "compañeros"?

Yo solo sé que cuando yo estudiaba, en mi instituto se sabía todo... todo. Y cuando sucedía algo así antes de la hora del recreo lo sabía todo el mundo, incluidos los profesores.

¿Por que ningún adulto lo evito? Esa es la pregunta de la que quiero respuesta, de la que no quiero más silencio.

5 comentarios

Marta -

Buenos días Carlos, ya sé que te debía una respuesta :P

Las respuestas de algunos de mis compañeros:
-miraría a ver que defectos tienen ellos, y les respondería con la misma moneda.
-pasaría de ellos...

Pero son respuestas de gente que ya tiene un bagaje de experiencias y vivencias... Como bien apunta Susana.

La respuesta que le dijo el crio es que así, con esos ojos más grandes, él vería mejor las cosas. Y que además, a su madre le gustaban sus ojos.

susana -

Hola chicos:
Estoy de acuerdo contigo Marta, los padres juegan un papel fundamental en este tipo de situaciones.
Carlos eso es lo que contestarías ahora, lo que contestaríamos todos con cierta edad y perspectiva pero cuando tienes 14 años no es tan fácil. Ni tu autoestima ni tu personalidad estásn tan definidas. Te sientes sólo y piensas que el mundo empieza y acaba en ese instituto. En fin, es un problema complicado que se empieza a dar demasiado a menudo y que debemos solucionar entre todos. Un saludo.

Marta -

La respuesta te la diré mañana, pero, yo también fui un "patito feo" de pequeña, delgaducha, con gafas, y un pequeño problema de dicción que me impedía decir "coche" correctamente. Pero... Aprendí, maduré, y... Sshhh, que sino te desvelaré la respuesta.

Besos

Carlos -

Tienes toda la razón Marta, y estas son las cosas que se hablan siempre cuando sucede algo así...

pero yo sinceramente estoy harto de que los adultos se vayan siempre de rositas... de que miren para otro lado a los monstruos que crían y que nadie los haga responsables de nada.

¿Que respondería?

Que tengo un ojo todavía más salto en el centro de mi culo y que el podía besarlo.

Esa es una buena respuesta para ganarte el respeto...(a tortas después eso sí) y lo digo porque de pequeño era gordito y con gafas.

Marta -

Hola Carlos, no hay respuesta para eso.
Pero son situaciones que no vienen dadas ahora, sino que llevan existiendo desde siempre.
Quien no recuerda tener un compañero gordito, a quien le llovían los insultos, o al que tenía gafas, convertirse en objeto de burla?
Algunos desarrollan una auto-defensa contra esos insultos, y otros, se convierten en seres desprotegidos, e inseguros en su vida adulta.
En cualquier caso, no sólo corresponde al tutor o maestro el papel de apaciguar ese "juego de niños", sino también -y en todos los casos- a los padres, personas donde los hijos se ven reflejados en pensamiento y hechos.
Un día, en Psicología, la profesora nos puso un ejemplo real, ocurrido con su hijo.

El crío debe tener los ojos saltones, y sus compañeros de clase, le dijeron algo parecido a que se parecía a una rana, o algo por el estilo. El niño, no dijo nada, pero esa misma tarde, le preguntó a su madre si tenía los ojos saltones. Su madre le contestó que tenía los ojos grandes, y bonitos. (primera respuesta, como madre)
Pero le preguntó que a que se debía esa pregunta, y el niño, le contó el episodio.
Como psicóloga, le preguntó a su hijo, que les había contestado...

¿Que hubieras (hubierais) contestado en el lugar del niño?